Palabras dirigidas por san Juan María Vianney en 1859 a Ernest Hello y a Georges Seigneur, que pedían consejos sobre la fundación de un diario católico: El comienzo de una gran obra debe ser pequeño. No es la cuestión financiera la que os debe afligir. Todo lo que Dios quiere se arregla, no se sabe cómo. Tendréis el auxilio necesario y, aún faltando este, debéis comenzar. Vivimos en un mundo miserable. Debéis exponer esta miseria y decir la verdad sin acepción de personas. Hay una masa de mentiras y de errores que debéis disipar, sin mirar a las personas que los difunden. Debéis combatir el error, aun entre los católicos, pues estos tienen menos derecho —si puedo hablar de derecho— que los otros a predicar ideas erróneas. Amad a vuestros adversarios. Rezad por ellos, pero no debéis saludarlos. Es tiempo perdido. No procuréis agradar a todos, ni a todos podéis agradar. Procurad agradar a Dios, a sus ángeles y a sus santos. ¡Ese es vuestro público! Pues bien, hijos míos, ¡manos a la obra! Los que se apartan de vosotros, los que os censuran por falta de amor, íntimamente os darán razón: tal vez os defiendan públicamente. Si los hombres pudiesen ver cómo trato a “Grappin” [mote despreciativo regional con el que el santo designaba al demonio], dirían que no lo amo. Le meto miedo, le causo espanto, lo lanzo a tierra y le digo: “Grappin, tú me atacas muy bien, yo también me defiendo”. Pero vosotros, hijos míos, me diréis que los hombres no son demonios. Sin duda, muchos no son demonios. Pero en todos los que no están unidos íntimamente a Cristo hay latente algo de diabólico; contra eso debéis levantaros como ejecutores de justicia. El error es un obstáculo para la unión. ¡Dios mío, cuán inescrutable es la verdad, cuán inaccesible, cuán repleta de vida! Una vez más, no dejéis de combatir el error. Y para esto gastad la mayor parte de vuestro tiempo. Comenzad, pues, y ¡perseverad! No os dejéis intimidar por la contradicción. Contradicción no vale nada. Haréis bien, y mucho bien. San Juan María Vianney
|
Navidad En el “crepúsculo” del Sol de Justicia |
Capítulo 10: Un signo de contradicción El profeta Simeón, sosteniendo al Niño Jesús en sus brazos durante su presentación en el Templo, profetizó que Él sería un signo de contradicción: de salvación para algunos que lo aceptarían y de perdición para otros que lo rechazarían... | |
Meditación sobre la muerte: necesaria y saludable Considera que tierra eres y en tierra te has de convertir. Día llegará en que será necesario ir y pudrirse en una fosa, donde estarás cubierto de gusanos. A todos, nobles o plebeyos, príncipes o vasallos, ha de tocar la misma suerte... | |
La devoción al Inmaculado Corazón de María El 13 de junio de 1917 tiene lugar en la Cova da Iría la segunda aparición de la Santísima Virgen de Fátima... | |
La Revolución Francesa: Heredera del protestantismo y del neopaganismo renacentista El odio a todas las desigualdades llevó a una minoría revolucionaria al terror sanguinario de la Revolución Francesa. El mismo proceso revolucionario prosigue hoy en todo el mundo, y el conocimiento de esta revolución paradigmática nos ayuda a enfrentarlo con eficacia... | |
Respeto a la autoridad legítima En lo que a esta depravada doctrina y a estos sistemas toca, ya es a todos notorio que ellos persiguen principalmente, abusando de los términos de libertad e igualdad... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino