Especiales La Iglesia autoriza el culto a Nuestra Señora de Fátima

Célebre Imagen de la Virgen de Fátima llega desde Portugal a la Plaza de San Pedro en Roma, 12 de octubre de 2013

Invocando humildemente al divino Espíritu Santo y confiados en la protección de María Santísima, después de haber oído a los Rvdos. Consultores de esta nuestra diócesis:

Tenemos a bien

1º declarar como dignas de crédito las visiones de los niños en la Cova da Iria, parroquia de Fátima, de esta diócesis, los días 13 de mayo a octubre de 1917;

2º permitir oficialmente el culto a Nuestra Señora de Fátima.

Réstanos, amados hijos en Nuestro Señor, advertiros que, si para nosotros es un gran motivo de alegría y consolación la gracia que la Santísima Virgen nos concedió, mayor es la obligación de corresponder a su bondad.

La experiencia de años demuestra que “los ojos de Dios están abiertos y los oídos atentos a las oraciones en este lugar” (2 Cr 7, 15), pero es preciso que por la pureza de nuestra vida, práctica de los Mandamientos de la Ley de Dios, observancia de los preceptos de la Iglesia, respeto y sumisión a las direcciones de la Sede Apostólica, nos mostremos integralmente católicos, pues no todo el que dice: “Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mt 7, 16).

La Santa Iglesia al referirse al misterio de la Encarnación del Verbo divino, exclama: “¡Oh beneficio digno de eterna gratitud! ¡Dios se nos dio a conocer de un modo visible a fin de que, viéndolo, seamos abrasados en el amor de las bellezas invisibles!”

Recomendamos de una manera especial a nuestros queridos diocesanos el amor a Nuestro Señor Sacramentado, la devoción a la Santísima Virgen, a san José, a las benditas almas del Purgatorio, la recitación diaria de al menos la tercera parte del rosario, la fuga del pecado de la carne, de las modas inmodestas y lecturas inmorales, la práctica de la penitencia en que Jesús tanto insistió y la Virgen, Nuestra Señora, tanto recordó, caridad para con todos los hermanos y principalmente para con los enfermos y pobrecitos…

Si así lo hacemos, se pueden aplicar a nuestra Patria las palabras del Profeta: “Si enmendáis vuestra conducta y vuestras acciones… habitaré con vosotros en este lugar, en la tierra que di a vuestros padres, desde hace tanto tiempo y para siempre” (Je 7, 5 y 7).

 

Mons. José Alves Correia da Silva, obispo de Leiria, Carta Pastoral sobre el culto a Nuestra Señora de Fátima, 13 de octubre de 1930

Palabras del Director Nº 183 - Marzo de 2017 – Año XVI Nuestra Señora de Sonsoles
Nuestra Señora de Sonsoles
Palabras del Director Nº 183 - Marzo de 2017 – Año XVI



Tesoros de la Fe N°183 marzo 2017


Nuestra Señora de Sonsoles Dulce Protectora de Ávila
Marzo de 2017 – Año XVI La Iglesia autoriza el culto a Nuestra Señora de Fátima Nuestra Señora de Sonsoles ¿Por qué el tercer secreto de Fátima no fue divulgado en 1960? Jesús en lo alto del Calvario San Gregorio de Nisa La Comunión de los Santos Venecia, joya del mundo



 Artículos relacionados
La Primera Comunión de Lucía María Rosa, madre de la hermana Lucía, era la catequista de la aldea. Los niños acostumbraban reunirse en su casa para aprender la lección...

Leer artículo

Oración de las fuentes milagrosas de Fátima Salve María, fuente de gracia, de piedad y de misericordia; manantial inagotable de dulzura y de clemencia...

Leer artículo

San Antonio de Padua Cuando estuve en Padua, Italia, visité la famosa Basílica de San Antonio. Recuerdo haber visto, en una columna de su interior, el cuadro de un fraile franciscano robusto, fuerte...

Leer artículo

La Virgen de los Ermitaños de Einsiedeln ¿Cómo explicar que el santuario mariano que recibe al mayor número de peregrinos de Suiza —y uno de los más visitados de todos los países de lengua alemana— esté dedicado a Nuestra Señora de los Ermitaños?...

Leer artículo

La familia, el matrimonio y el derecho natural La familia, célula primera y vital de la sociedad, no es una creación del derecho ni de la ley, sino obra de Dios, y propia de la naturaleza humana. Dios creó al varón y a la mujer y les mandó “crecer y multiplicarse” (Gén 1, 28)...

Leer artículo





Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino