Hay que creer que la misma Reina celestial añadió gran virtud a esta oración fundada y propagada por el ínclito Patriarca Domingo, por inspiración e impulso de la Señora, como bélico instrumento y muy poderoso para dominar a los enemigos de la fe en un período muy contrario al nombre católico y muy semejante a este que estamos atravesando. Pues la secta de los herejes Albigenses, ya clandestina, ya manifiesta, había invadido muchas regiones; la infecta generación de los maniqueos, cuyos crueles errores reproducía, dirigía contra la Iglesia sus violencias y un odio extremado. Apenas podía ya confiarse en el apoyo de los hombres contra tal perniciosa e insolente turba, hasta que vino Dios con el auxilio oportuno, con la ayuda del rosario de María. De este modo, con el favor de la Virgen, vencedora gloriosa de todas las herejías, las fuerzas de los impíos quedaron extenuadas y aniquiladas, y la fe salva e incólume. La historia antigua, lo mismo que la moderna, conmemora con clarísimos documentos, muchos hechos semejantes sucedidos en todas las naciones y bien divulgados, ora sobre peligros ahuyentados, ora sobre beneficios obtenidos. Hay que añadir también a esto el claro argumento de que, tan luego fue instituida la oración del rosario, la costumbre de recitarla fue adoptada y frecuentada por todos los cristianos indistintamente. Efectivamente, la religión del pueblo cristiano honra con insignes títulos, y de varias maneras por cierto, a la Madre de Dios, que aunque saluda con tantas y tan augustas alabanzas, brilla una que aventaja a todas; siempre tuvo cariño singular a este título del rosario, a este modo de orar, en el que parece que está el símbolo de la fe y el compendio del culto debido a la Señora; y con preferencia lo ha practicado privada y públicamente en el hogar y en la familia, instituyendo congregaciones, dedicando altares y celebrando magníficas procesiones, juzgando que es el mejor medio de celebrar sus solemnidades sagradas o de merecer su patrocinio y sus gracias.
León XIII, encíclica Octobri mense, sobre el Rosario, del 22 de setiembre de 1891, in https://mercaba.org/LEON%20XIII/octobri_mense.htm.
|
Cristiandad Sacralidad en el orden temporal |
El Nacimiento del Niño Jesús San José duerme, las ovejas están cerca, el burro también, y los ángeles colman el cielo, cantando la Gloria de Dios... | |
Oración de las fuentes milagrosas de Fátima Salve María, fuente de gracia, de piedad y de misericordia; manantial inagotable de dulzura y de clemencia... | |
Acelerada marcha del nudismo Todo comenzó con noticias de que mujeres feministas, reunidas en un grupo llamado Femen, realizaban en Ucrania manifestaciones de protesta, siempre en topless y a veces casi totalmente desnudas. El hecho en sí mismo no sería capaz de despertar mayor interés. Pues, a lo largo de la historia,... | |
¿Cuál es la esencia de la Santa Misa? Al decir que su cuerpo se entrega y su sangre es derramada, Nuestro Señor indica claramente que su gesto va más allá de la propia cena pascual... | |
La era futura o Reino de María, llegará a través de la Divina Misericordia El Corazón Misericordioso de Jesús y el Corazón Inmaculado de María forman como que un solo corazón a la hora de interceder por la salvación de los hombres... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino