La gloria de Dios, cantada por la flecha de un templo altanero Plinio Corrêa de Oliveira
ROUEN, la ciudad en donde Santa Juana de Arco fue martirizada por los ingleses, posee una de las catedrales góticas más bellas de Francia. En la ilustración de la catedral, observen su enorme impulso hacia el cielo. La torre se va adelgazando, y se diría que su punta se va transformando en cielo. A tal punto que no se sabe bien si la punta es más aire que tierra, más luz que piedra. Demuestra una voluntad de subir, refleja una elevación de alma. En el prefacio de su Historia de Santa Isabel de Hungría, Charles de Montalembert cuenta un hecho muy significativo. Un mahometano, apresado por los cruzados, recibió el permiso de viajar por Europa. Al ver las catedrales medievales, preguntó quién las había construido. Le señalaron al hermano lego de un convento y le explicaron: "Ésos son los hombres que construyen tales monumentos". Observó entonces el islamita: "¿Cómo pueden hombres tan humildes construir edificios tan altivos?"
Esa pregunta sintetiza el alma católica: humilde en cuanto a sí misma, pero insaciable de gloria para Dios. En este templo religioso, la gloria de Dios es cantada por una flecha que, simbólicamente, alcanza un pináculo más alto que todos los edificios. Símbolo de la Iglesia y de la sociedad temporal católica. La Iglesia enseñoreándose sobre todo. Ella y la Cristiandad cantan la gloria de Dios.
|
Historia Sagrada |
Los santos mártires de Gorcum Después de que Lutero rompió con la Iglesia, su revolución religiosa fue contaminando toda Europa como una erisipela. Surgieron entonces otros “reformadores”, como Calvino, que tuvieron mayor o menor suceso en sus rebeliones... | |
En la mesa se decide el éxito o el fracaso familiar y social En un hogar típico constituido por un matrimonio de abogados de éxito en Buenos Aires, los padres y los hijos no comían juntos... | |
De las penas del Infierno ¿Qué es, pues, el infierno? El lugar de tormentos (Lc 16, 28), como le llamó el rico Epulón, lugar de tormentos, donde todos los sentidos y potencias del condenado han de tener su propio castigo... | |
Dios no manda nada imposible Si los diez mandamientos son obligatorios para todos, no son imposibles para nadie. Está en nuestras facultades el observar aun los más difíciles, mediante los auxilios de la gracia que Dios nos ofrece, y que nunca niega a los que humildemente se la piden... | |
“Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia” – II Después de la Ascensión de Nuestro Señor Jesucristo al cielo, Pedro continúa teniendo la principal función en la Iglesia naciente... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino