En honor de la Santísima Trinidad, para exaltación de la fe católica y el incremento de la vida cristiana, con la autoridad de Nuestro Señor Jesucristo, de los santos apóstoles Pedro y Pablo y la nuestra, después de haber largamente reflexionado, implorando varias veces la ayuda divina y oído el parecer de muchos hermanos nuestros en el Episcopado, declaramos y definimos como santos a los beatos Francisco Marto y Jacinta Marto, y los inscribimos en el catálogo de los santos, estableciendo que, en toda la Iglesia, sean devotamente honrados entre los santos. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Con estas palabras el Papa Francisco canonizó a los pastorcitos Francisco y Jacinta Marto, el 13 de mayo de 2017 en el Santuario de Fátima, Portugal.
|
Santa Rosa de Lima IV Centenario de su gloriosa muerte |
|
La Virgen en el mediodía Es mediodía. Veo la iglesia abierta. Es preciso entrar. Madre de Jesucristo yo no vengo a rezar. No tengo nada que ofrecer ni nada que pedir... |
|
Vitrales de la catedral de Chartres El espíritu de la Iglesia es el espíritu de Dios: sabe unir lo práctico a lo bello. De tal manera que, al ver una obra de arte, se nota que en ella se utiliza lo práctico casi sin pensar en él, y se admira lo bello como si sólo él existiese... |
|
¿Qué pasa con Facebook? A primera vista Facebook parece ser una sorprendente afirmación de la autoestima y del bienestar social. En un solo sitio, una persona coloca en vivo todos aquellos detalles únicos, logros y eventos que lo hacen muy distinto de los demás. Al mismo tiempo, el usuario es libre de compartir... |
|
Apetito de extravagancia total Lo que a continuación se afirma sobre el snobismo1, como vehículo de expansión de la droga, conserva gran actualidad y puede aplicarse a todos los tipos de degradación moral que sufre nuestra sociedad... |
|
¿Cómo vivir rodeado de riquezas y acumular merecimientos para la eternidad? Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos” (Mt 5, 3)... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino