Cuando se rompen los vínculos que atan al hombre a Dios, que es el legislador y juez supremo y universal, no queda sino la apariencia de una moral meramente profana, o como ellos dicen, de una moral independiente que hace caso omiso de la Razón eterna y de los preceptos divinos y que, por eso, lleva inexorablemente a la última y más desastrosa consecuencia que consiste en la conversión del hombre en norma para sí mismo. Incapaz ya de elevarse a los bienes sobrenaturales en alas de la esperanza cristiana, solo buscará pastos terrenales en que pueda hartar el hambre de todos los goces y comodidades de la vida, y se aumentará la sed de placeres, el afán de riquezas, el deseo de rápido y excesivo lucro sin atender las reclamaciones de la justicia, se consumirá en ambición y en fiebre de satisfacerla aunque sea mediante el atropello del derecho, y finalmente, llegará al desprecio de las leyes y de la autoridad pública para desembocar en una licencia general de costumbres que traerá consigo un verdadero descalabro de la civilización. En todos los miembros del organismo social se harán sentir las torturantes consecuencias, comenzando por la familia, pues, el Estado laico, sin atender a los límites de sus derechos y al fin esencial que tiene cada cosa, intervino con su acción para profanar el vínculo matrimonial, despojándolo de su carácter religioso, irrumpió con suma violencia en su derecho primario a la educación de los hijos, destruyó a menudo la indisolubilidad del matrimonio permitiendo legalmente el nefasto divorcio.
Papa León XIII, encíclica Parvenu à la Vingt-Cinquième Année, del 19 de marzo de 1902.
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Fray Martín de la Caridad ¡Gloria inmortal a tu bendito nombre! |
Deterioro moral del mundo moderno Quisiera saber si… una esposa que no ama más a su marido, porque la decepcionó mucho en ocho meses de casada. Ella no tiene hijos con él: cuando se casaron, él estaba divorciado y tenía dos hijas. Ya se había hecho una operación para no tener otros hijos. No los quiere, pues dice que no tiene paciencia con los niños, que no es su sueño y que ya tiene dos. Su familia también no quiere que tenga más hijos y además se vive entrometiendo en este asunto... | |
Todo atentado contra la familia atenta contra la humanidad La dignidad, los derechos y los deberes del hogar familiar, establecido por Dios mismo como célula vital de la sociedad, son, por ello mismo, tan antiguos como el mundo; son independientes del poder del Estado que debería protegerlos y defenderlos, si se hallan amenazados... | |
Todos somos un poco ateos Como Dios nos hizo grandes y quiso que dominásemos la creación entera, sigue halagándonos la más vieja de las tentaciones: ser como Dios... | |
¿Puede el hombre prever los acontecimientos? Por ser “La Palabra del Sacerdote” una de las columnas más apreciadas de Tesoros de la Fe, con el fallecimiento del recordado Mons. José Luis Marinho Villac la dirección de la revista Catolicismo [que publica originalmente esta columna] me pidió que le diera continuidad, respondiendo a las consultas hechas, en su mayoría sobre temas religiosos... | |
Incesante rivalidad entre la cruz y el mundo Queridos hermanos, ahí tenéis los dos bandos con los que a diario nos encontramos: el de Jesucristo y el del mundo. A la derecha, el de nuestro amable Salvador... |
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